Tiempo: Sol, nubes y nada de viento
Jornada 1:
La corriente nos frenó la marcha que llevaba el velero y sólo en algún momento pudimos navegar a toda vela.
Un baño en el medio del mar del Caribe bajó nuestro mareo acumulado por el baiven del velero, junto a la comida y el atardecer, transformó un dia de infierno en un sueño hecho realidad.
Jornada 2:
En medio del Caribe y con el alba floreciendo en luces brillantes tras alguna nube, Fabio continua luchando junto al motor contra las fuerzas del mar sin la ayuda del viento. La corriente sigue siendo fuerte y en contra, con lo que ha tenido que tirar todo el día de motor, quejándose repetidas veces de que, con esta velocidad tan lenta, que el mar nos obligaba a tener, llegaríamos más tarde de lo esperado y lo más seguro es que tendríamos que parar en la isla de San Blas para llenar de nuevo un depósito de gasolina que, en condiciones normales, no se requiere.
Además de la lentitud, Fabio ha intentado varias veces de alzar las velas sin suerte, ya que el viento era demasiado débil para tirar de nosotros.
Pasaron las horas y las olas dejaban el barco aún peor que la jornada anterior moviéndose de manera enérgica de lado a lado sacudiendo nuestros cuerpos que iban sobre él y mareando con su baile a todos los presentes, todo ello acababa de empeorar la situación que en ningún momento encendió una luz a la esperanza.
Intentando ayudar en todo lo que necesitaba con mareos frecuentes comimos pasta que había sobrado el día anterior con queso y huevos. Una inyección de comida que me vino muy bien para hacer frente a la tarde que por otro lado me quedé reposando y escribiendo en el camarote aún con algún mareo que estoy teniendo en estos momentos.
Pasados esos malos momentos y recuperando un poco el aliento conseguí salir a la escotilla donde pasé toda la tarde mirando al cielo, el suave y poco intenso atardecer y seguido por las estrellas. Cenamos pollo al horno con papas riquísimo y junto a que poco a poco en la noche llegábamos al canal de san Blas donde el mar se iba poniendo más tranquilo con lo que el descanso fue más placentero y menos movido. Esa fue la mejor noticia del día pero aún así daba una buena nota en general a mi travesía en velero por el caribe.
Etiqueta: La vuelta al mundo
06 / 11 / 15