Esta mañana me he levantado cansado de la fiesta croata y con pocas ganas de moverme, así que he puesto el relax en mi cabeza y me he dejado llevar por Matija y su hermano Stephan. Primero hemos ido a uno de los dos bares de Kanfanar llamado Joy, donde hemos tomado un café late y, con más calma ya, nos hemos puesto ha hacer cosillas.
Matija me ha llevado a ver Pula, es la capital de Istria, y está tocando la costa. Como cosas a destacar está el anfiteatro romano, que tiene miles de años y es de los pocos que se han mantenido en buen estado. También me ha llevado hasta la puerta del oro, que es igualmente un lugar muy destacado de la ciudad.
Por otra parte, Matija y su familia están a punto de abrir una tienda de queso manchego, pasta y jamón ibérico en el mercado de Pula. Mercatino se llama su tienda y esperan captar a los amantes de los quesos y aumentar de esta manera su clientela. De ahí me ha llevado a montar un stand, que tienen en la feria del aceite de oliva, que se celebra durante el fin de semana en Pula.
Pasado el montaje hemos ido a comer, ya un poco tarde, a casa de sus padres, donde su madre ha preparado pasta de la casa con queso manchego y carne. Hemos descansado y después nos hemos ido a tomar un té en el bar...
Ese ha sido mi día de paseo en Pula y mañana me han invitado a la feria y ha ver el partido de Croacia contra Islandia, que promete ser un espectáculo, en casa de sus tíos y con toda la familia Maric.